domingo, 2 de julio de 2017

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Su prometido acabó la relación justo antes de la boda, así que ella decidió cambiar TOTALMENTE



Jen Atkin, de 24 años, estaba convencida de que nadie más la querría después de que su prometido rompiera con ella nueve meses antes de su boda. Pero en lugar de hundirse en la autocompasión, decidió cambiar las cosas y ahora está más feliz que nunca.




Jen pesaba 110 kilos y estaba muy deprimida por ello. Pero después de dos años de la ruptura, logró perder casi 50 kilos y pasó de ser talla 22 a 10.




A pesar de que habría sido más fácil ahogar sus penas en comida chatarra después de que su prometido la dejó, tomó la ruta más difícil pero más gratificante: el gimnasio.


Ahora, después de perder tanto peso y sentirse más confiada en sí misma, ha encontrado el amor de nuevo.

Jen dijo, “aunque le deseo a mi ex todo lo mejor, en secreto espero que vea lo que se perdió. No creo que pudiera reconocerme. Cuando nos separamos, estaba devastada pero terminó siendo lo mejor que me pasó”.
Según Jen, su ex novio, Tom, fue su primera relación real. “Me sorprendió que alguien quisiera estar conmigo, teniendo el tamaño que yo tenía. Nos quedamos atrapados en una horrible rutina. En la semana, comía enormes porciones de pasta o pizza y una barra de chocolate de tamaño familiar”.
Durante los fines de semana, se quedaban en casa, comiendo comida rápida. Entre más tiempo pasaban juntos, más peso ganaba.

A pesar de que parecía estar contenta, Jen siempre creía que sería más feliz si fuera más delgada. “Cada año en mi cumpleaños soplaba mis velas y deseaba ser más delgada”, dijo.
Un año después de que Tom le propuso matrimonio, mientras planeaban su boda, de repente terminó la relación. Jen se sintió destrozada y admitió que lloró durante semanas.“Siendo tan gorda, pensé que ningún otro hombre me encontraría atractiva,” dijo.
Jen pronto decidió hacer un cambio. Se inscribió en su gimnasio local y comenzó a entrenar. Comenzó en las cintas de correr, y luego progresó a clases de entrenamiento de alta intensidad.

También limitó su dieta a mil 500 calorías al día.
Siete meses después de que su relación terminara, Jen encontró el amor con un amigo de la escuela, Chris Wilkinson.

Jen dijo, “había algo que faltaba cuando estaba con Tom, así que él y yo usábamos comida para llenar ese vacío. Ahora estoy con Chris, no necesito nada más”.

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